jueves, 8 de mayo de 2014

El cáncer de ovario es el sexto más frecuente entre las mujeres


Factores de riesgo, hábitos saludables
y algunos síntomas que requieren consulta ginecológica


En España se diagnostican unos 3.300 casos anuales de esta patología, lo que representa el 5,1% de los cánceres entre las mujeres; por detrás de los de mama, colorrectales y de cuerpo de útero. La incidencia en nuestro país se puede considerar alta, con un ascenso lento pero constante desde los años 60.

El cáncer de ovario es un tumor propio de las edades medias de la vida. La mayoría de los casos se diagnostican entre los 45 y los 75 años. Hay un número significativo de casos desde los 30 años, y no es infrecuente diagnosticar tumores en jóvenes desde los 15.

No existe actualmente ningún método eficaz que facilite el diagnóstico precoz, por lo que hasta el 75% de los casos se presentan en fases avanzadas.

Entre un 5 y un 10% de los tumores de ovario se atribuyen a factores genéticos heredados. Una historia familiar de cáncer de mama, ovario, endometrio o colon aumenta el riesgo de padecer cáncer de ovario. Lo mismo sucede en mujeres portadoras de una mutación en el gen BRCA1 o BRCA2.

Los tratamientos hormonales previos también son un importante factor a tener en cuenta: mientras que los anticonceptivos orales (OC) protegen contra esta enfermedad (se estima hasta un 50% menos de incidencia en aquellas mujeres que han tomado anticonceptivos 5 o más años), la terapia hormonal sustitutiva (THS) administrada durante la menopausia parece que aumenta el riesgo. Los datos son aún contradictorios en aquellas mujeres que han recibido tratamientos para aumentar la fertilidad.

Otros factores de riesgo son la ausencia de embarazos y el sobrepeso. Según estudios recientes, el tabaquismo también  aumenta el riesgo de padecerlo.
Los embarazos y la lactancia protegen del cáncer de ovario, y en menor medida también son protectores el ejercicio moderado y seguir una dieta pobre en grasas animales y rica en frutas y vegetales, especialmente los que contienen carotenoides y fitoestrógenos.

Actualmente, se llevan a cabo estudios de screening en poblaciones en las que existe un alto riesgo de desarrollo de la enfermedad, como es el caso de las mujeres con uno o más familiares de primer grado con cáncer de ovario (madre o hermana) o pacientes con antecedentes personales de cáncer de mama.

Es importante que consultes con tu médico si aparece cualquiera de los siguientes síntomas y perdura en el tiempo:

*Hinchazón o aumento del diámetro abdominal.
*Dolor pélvico o abdominal persistente.
*Dificultad para comer o sensación de plenitud continua.

Debido a las características especiales del cáncer de ovario, ante la sospecha de su existencia es obligado intervenir quirúrgicamente a la paciente para:

  Confirmar el diagnóstico de la enfermedad.
  Conocer cuál es el tipo de tumor y su extensión. 

Además de servir para el diagnóstico esta intervención ya supone el tratamiento quirúrgico de la enfermedad. En función de los hallazgos de la cirugía, será necesario complementar el tratamiento con quimioterapia.

Dra. Ángela Escobar
@GinecoLogica

El 8 de Mayo es el Día Mundial contra el Cáncer de Ovarios